
Arrendamientos, ¿componente de la cifra de negocios?
octubre 9, 2024La gestión eficiente del remanente de tesorería es esencial para las universidades públicas españolas, especialmente en un contexto donde diversas instituciones enfrentan desafíos financieros significativos. Por ejemplo, las universidades públicas en España requieren una inversión adicional de más de 3.000 millones de euros para alcanzar el objetivo del 1% del PIB en gasto educativo para 2030, según establece la Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU). Actualmente, el gasto se sitúa en el 0,79% del PIB, habiendo aumentado apenas unas décimas en dos años (Cadena SER).
Además, las universidades públicas de la Comunidad de Madrid han expresado su preocupación por la asfixia financiera que pone en peligro su existencia, destacando que la situación es crítica en todo el país. España destina a la educación superior un 24% menos que la media europea, lo que agrava la crisis del sistema universitario (El País).
En Andalucía, los rectores de las nueve universidades públicas y la Junta de Andalucía han llegado a un acuerdo sobre la financiación para 2025, tras más de dos meses de negociaciones. La Consejería de Universidad, Investigación e Innovación se ha comprometido a abonar los complementos salariales del personal docente y administrativo pactados anteriormente con los sindicatos y a crear una comisión técnica para consolidar 25 millones de euros reconocidos como financiación extraordinaria (El País).
Estos ejemplos resaltan la importancia de una gestión financiera adecuada del remanente de tesorería para prevenir problemas de liquidez y garantizar la estabilidad económica de las universidades públicas en España.
Normativa Aplicable
En España, el uso del remanente de tesorería en universidades públicas está regulado principalmente por la Ley General Presupuestaria y la normativa autonómica correspondiente. Además, las universidades están sujetas a la Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU) y a los principios de estabilidad presupuestaria.
Desde 2021, tras la flexibilización de las reglas fiscales en el contexto post-pandemia, las universidades han contado con una mayor capacidad para aplicar estos remanentes, aunque siempre bajo la supervisión de los órganos de control económico y financiero. La correcta planificación de estos recursos es clave para evitar desequilibrios financieros futuros.
Estrategias para Prevenir Problemas de Liquidez
- Planificación Financiera a Largo Plazo
- Elaboración de escenarios de ingresos y gastos para prever necesidades futuras.
- Creación de un fondo de contingencia con parte del remanente para afrontar imprevistos.
- Establecimiento de políticas de gasto prudentes y alineadas con los ciclos presupuestarios.
- Gestión Eficiente del Flujo de Caja
- Programación de pagos e inversiones para evitar tensiones de liquidez en períodos críticos.
- Priorización de gastos estratégicos que generen un retorno financiero o académico sostenible.
- Evaluación periódica de la capacidad de pago antes de comprometer nuevos recursos.
- Optimización de Ingresos y Reducción de Dependencia de Financiación Externa
- Diversificación de fuentes de ingresos mediante convenios con empresas y organismos internacionales.
- Impulso de programas de formación y consultoría que generen ingresos propios.
- Gestión activa de activos y patrimonios para maximizar su rentabilidad.
- Refuerzo de la Solvencia y Sostenibilidad Financiera
- Amortización anticipada de deuda para reducir la carga financiera a largo plazo.
- Constitución de reservas financieras para garantizar el cumplimiento de obligaciones en caso de crisis económica.
- Implementación de medidas de control y seguimiento del gasto operativo.
- Uso Estratégico del Remanente para Mejorar la Liquidez
- Aplicación del remanente en inversiones que mejoren la eficiencia operativa y reduzcan costes fijos.
- Creación de programas de autofinanciación a partir de proyectos de investigación y transferencia de conocimiento.
- Rediseño de estructuras de becas y ayudas para evitar compromisos insostenibles en el tiempo.
Consideraciones Finales
La correcta gestión del remanente de tesorería es una herramienta clave para evitar problemas de liquidez en universidades públicas. Una planificación prudente y estratégica permitirá no solo garantizar la solvencia financiera a corto y largo plazo, sino también optimizar los recursos disponibles para el cumplimiento de los objetivos académicos y científicos de la institución. La transparencia en la ejecución y la supervisión constante son esenciales para mantener una estabilidad presupuestaria sostenible.